[Text in Spanish]: Cuando Roger Money-Kyrle (1898-1980) dijo en 1960 que «hay numerosos problemas que acosan a la humanidad que hay que resolver [y que reclaman] una aproximación libre de prejuicios…», pareciera que estuviera refiriéndose a estos días llenos de incertidumbres, fanatismos y exclusiones; después de cincuenta años creo que sus explicaciones sobre el prejuicio pueden servir para entender el mundo de los malos entendidos que generan sufrimiento mental y conflictos sociales. El lenguaje sencillo de Money-Kyrle responde a la sabiduría acuñada a lo largo de una historia enriquecida tanto en su participación durante las dos grandes guerras como a su dedicación al estudio. Este filosófo, antropólogo y psicoanalista británico, que se había analizado con E. Jones, con S. Freud —mientras estuvo en Viena realizando su tesis doctoral con Mortitz Schlick— y luego con M. Klein, en Londres, se interesó por temas como el desarrollo simbólico, las causas de las guerras, la política, la ética, etc.
Money-Kyrle presenta el prejuicio como una representación derivada de un razonamiento defectuoso y como una consecuencia de la intolerancia a la confusión; en el trabajo que hoy presentamos considera los mecanismos empleados en la construcción del prejuicio y analiza la resistencia al cambio como una de las dificultades para superarlos. Dada la significación que los prejuicios tienen en el mantenimiento y hasta el estímulo de la «animosidad entre razas, naciones o partidos cuyos sistemas de convicciones religiosas o políticas son extremadamente diferentes unas de otras» considero que el presente artículo es una contribución necesaria —también— para nuestro tiempo.
Carlos Tabbia leave a comment