Este artículo surge de la conferencia que impartí en unas jornadas en Budapest. Pretende hacer una reflexión sobre la prevención en la salud. Intenta ayudar a que los profesionales e instituciones que intervienen en la salud, tomen conciencia de la necesidad de la creación de vínculos emocionales sanos entre los seres humanos.
Prevenir favoreciendo la salud mental en la infancia y la adolescencia (los adultos del futuro), es menos costoso emocional y económicamente, que hacerse cargo de los trastornos y enfermedades posteriores. La prevención evita sociedades futuras enfermas.
El artículo intenta transmitir la importancia de la atención a la infancia, la adolescencia y la familia y desarrolla la idea de que lo verdaderamente importante en las relaciones pasa por la autenticidad y el sentimiento. Acompañar en y con los sentimientos es el núcleo del Método AcSent, una herramienta probada y eficaz en la promoción de la salud.
Palabras clave
prevención, salud, sentimiento, acompañar, acsent
Texto
El desarrollo de la personalidad se logra a través de experiencias de relaciones íntimas e intensamente emocionales. El grupo padre-madre e hijo es una relación de «a tres»; son tres mentes en funcionamiento que se alimentan unas a otras dando lugar a una experiencia emocional (Nuria Abelló y Manuel Pérez Sánchez introducen el concepto de «unidad originaria»). Los profesionales de infancia coincidimos en que la salud mental de los niños está muy condicionada a la calidad de las relaciones afectivas —especialmente la familia— y a la estabilidad y continuidad de estas relaciones. De acuerdo con D. Meltzer y J. Thomas, la familia es una estructura básica que favorece la organización mental de los hijos. Y es el marco de crecimiento emocional entre todos sus miembros.
Los niños saben cuándo son queridos y cuándo no. Lo detectan internamente. Es algo profundo, pasa por lazos invisibles. El adulto no puede engañar. Creo que los profesionales que nos dedicamos a la salud mental de la infancia tenemos que ayudar al auténtico y profundo encuentro emocional entre los padres/cuidadores y los hijos.
La niñez necesita del amor y la profunda comprensión para crecer en condiciones. No se puede amar si no se ha sido amado. El niño es un ser de influencias. La mayor influencia es la de sus padres, seguida de la familia en general, el pediatra, las enfermeras, los cuidadores de guardería, los maestros…
Cada día creo más en el trabajo de prevención para favorecer la salud mental en la infancia. No olvidemos que los niños y los adolescentes de hoy son los adultos del mañana. Es menos costoso emocional y económicamente trabajar la prevención que hacerse cargo de los trastornos y enfermedades posteriores. Si […]
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